No soy yo cuando me presento ante todos
Ni eres tú cuando hablo de tí
Te invento y me recreo
porque te guardo y me guardo
ante el temor de volvernos reales.
No eres tú el que calla mi nombre
Ni soy yo cuando me olvido de tí
Somos aquellos seres lejanos
que viven el desencanto
de no haberse conocido.
Hola, Emma:
ResponderEliminarMe gustó... bastante. Creo que prefiero leer a la persona (¿real esta vez?) que al personaje ficticio. Por mucho (aunque tal vez los caballeros no estén de acuerdo).
Saludos.
Muchas gracias Alisma!
ResponderEliminaryo también prefiero que lean a la persona (real)
un abrazo!
Emma, esas palabras me llegan hondamente. Que Dios te siga bendiciendo y me de la luz cada dia, para poder leerte. La poesia, que pertenece a un nivel elevado de conciencia, como dicen algunos, un poema es una ecuación perfecta, se convierte en un motivo para agradecer la vida. Besos
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